El queratocono es una enfermedad en la que la córnea pierde su forma natural de cúpula para adquirir una parecida a un cono. Esto sucede porque el colágeno, una de las fibras de las que está compuesta la córnea, se altera y pierde su fuerza. Como la córnea es el principal lente del ojo, la pérdida de su forma natural lleva a una degradación de la visión.
Haga clic en el video para ver la manera en la que el queratocono deforma la córnea.
Existen varios caminos para tratar el queratoconco, cada uno de los cuales es indicado de acuerdo a las características del paciente y al grado de severidad de la enfermedad.
Son adecuados para casos ligeros de queratocono. Su uso corrige las distorsiones en la visión causadas por la enfermedad.
Son la opción más común para pacientes que detectan el queratocono en una fase temprana o media. Su empleo fuerza a la córnea a tomar una forma más natural, además de que corrigen otros problemas de visión, como la miopía o el astigmatismo, en caso de que el paciente también los tenga.
También conocido por su nombre en inglés, crosslinking, este tratamiento funciona poniendo rivoflavina (una vitamina que refuerza algunos tejidos) en el ojo y después exponiéndolo a rayos utravioleta para estimular al colágeno presente en la córnea, de tal forma que el problema de queratocono no empeore.
También conocidos como anillos intraestromales, son dos estructuras semicirculares que se ponen dentro de la córnea para modificar su forma hacia una menos cónica. Esta solución puede emplearse en combinación con el entrecruzamiento corneal.
En los casos en los que el queratocono es agudo y degrada la calidad de vida de quien lo sufre, se recomienda el trasplante de córnea, que consiste en retirar la córnea deforme para remplazarla por una sana.
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